En anunció apareció en la edición número de 200 de GENTE, que llegó al público el 22 de mayo de 1969. Y decía de manera textual:

GENTE publicará una historieta. A no sorprenderse ni a pensar que le traemos el cuento o el dibujo fácil. Hemos pensado muy bien el caso y terminamos por decidirnos por este -para nosotros- nuevo idioma, porque lo consideramos el apropiado para llevar al lector, en toda su fuerza, la creación de los autores, a quienes hemos pedido «una historieta para adultos» con toda la explosión imaginativa (en el guion y en el dibujo) con que puedan encarnar un tema muy de hoy: El Eternauta.«

Y continuaba:

El Eternauta en GENTE, año 1969
La edición 200 anticipando el envío con un texto y el siguiente epígrafe: «Héctor Oesterheld y José Breccia muestran los primeros originales de El Eternauta a nuestro director, Carlos Fontanarrosa, y Enrique Walker. La sensacional historieta de ciencia ficción comenzará a salir a partir del próximo número de «Gente». Un hallazgo que une por siempre al legendario cómic y nuestra revista.

«Hemos encargado a dos maestros del género: al guionista Héctor G. Oesterheld y al dibujante Alberto Breccia, la realización de El Eternauta. Mostrará la invasión que cae sobre Buenos Aires y una pequeña familia y unos amigos aislados en su propia casa en medio de un mar de muerte, donde se habla de cómo se afanan para que no se les apague la vida y el amor ante el enemigo del otro mundo, sutil, ajeno, incomprensible, y donde se descubre casi sin querer el desamparo y soledad en que estamos frente al posible invasor»

Para redondear:

«Dentro de una semana comenzaremos la publicación de la historieta. Y será el comienzo de una nueva manera de comunicaros. Usted y nosotros” -cerraba el reporte de adelanto.

Ricardo Darin, en plena entrevista, sorprendiéndose por aquel recorrido de GENTE. «¿¡Del ’69!? ¡Un viaje en el tiempo! Increíble. No sabía, no sabía de esto», decía mostrando aquella presentación y disfrutando el mágico momento.

Dos días antes de la tapa de Ricardo Darin que GENTE publicaría el último miércoles 30 de abril a las cuatro de la madrugada (exacto momento en el que Netflix estrenaba los seis capítulos de la temporada inicial de El Eternauta), el actor recibió el registro de aquella serie gráfica, y sucedió lo siguiente:

-Le queremos acercar algo. No sabemos si lo ha visto. Es parte de la colección de GENTE perteneciente al año 1969 -le lanzamos a boca de jarro apenas nos sentamos frente al set preparado en la planta baja del palacio Duhau-Park Hyatt.

-¿¡Del ‘69!? -preguntaba Darin un tanto sorprendido.

-Sí, sí, sí. Tiene marcadas algunas páginas.

-¡Un viaje en el tiempo! -tomó el tomo de tono anaranjado un tanto apagado por las décadas-. A ver -lo abrió y empezó recorrer los sitios apuntados.

-Se trata de una versión que nuestra revista publicó a lo largo de 17 semanas, del 29 de mayo al 18 de septiembre.

-¿En serio?

-Tal cual… ¿Sabía que una década luego de la primera versión de El Eternauta, replicada a lo largo de 106 episodios en Hora Cero Suplemento semanal, ‘GENTE y la actualidad’ lanzó una versión de Héctor Oesterheld pero no con dibujos de Francisco Solano López, sino de Alberto Breccia, en medio de tapas como la llegada del hombre a la Luna y portadas de Alain Delon, Hugo Gatti y Susana Giménez, entre otras?

-¡¡Espectacular!! Mirá estos dibujos, ¡son una bomba!

-Qué lindo. Parece  que se llevó una sorpresa, nomás, Ricardo.

-Increíble. No sabía, no sabía de esto. Gracias.

El Eternauta en GENTE, año 1969
La portada de Roberto Galán y sus secretarias en el programa Si lo sabe, cante, sobre el aviso en tapa del inicio de El Eternauta en nuestra revista: se publicó el 19 de mayo de 1969.

Así anunciaba GENTE desde su copete la versión que habían ideado y preparado Héctor Oesterheld y José Breccia y se extendería a diecisiete ediciones semanales. Una versión con varios personajes y momentos recreados ahora por la serie de Netflix y otros que llevan distintos nombre o responden a nuevos giros adaptados a los tiempos que corren. Pero siempre con el mismo espíritu de la una de las obras cumbres del cómic latinoamericano.

Aquí, entonces, la presentación formal de aquel lanzamiento consumado en GENTE durante mayo de 1969:

«Un día un dedo aterrado aprieta un botón rojo -se leía en el copete que precedía al primer capítulo- . Los temibles ojos de óptica ajena nos eligen como presa apetecible. Todo estalla de pronto. Son los invasores que participan de esta alucinante historia. Buenos aires es el lugar elegido como cabeza de una invasión».

Así continuaba:

«La ciudad de siempre deja de serlo en un instante. No hay autoridades, no hay comercio, no hay gente por las calles vacías. Sólo retumban los pasos de los invasores. La novela El Eternauta fue publicada por primera vez hace diez años. Escrita por Oesterheld, uno de los mejores historietistas mundiales, y dibujada por Breccia, El Eternauta adquiere ahora una forma nueva, moderna, original».

«GENTE comienza hoy la publicación de esta novela que propone una nueva visión de nuestra comunicación con ustedes, en un mundo que ya se tutea con la Luna, nos hace vibrar con una aventura que cada día parece menos irreal, más cercana. A partir de hoy, de este momento, entremos juntos en ese mundo», cerraba GENTE como puntapie iniciar a un recorrido que acá, cincuenta y seis años luego, replicamos.

El Eternauta en GENTE, año 1969
La presentación de la obra maestra de Héctor G. Oesterheld, cuya versión para GENTE ilustró Alberto Breccia. Y su trama…
El Eternauta en GENTE, año 1969
Trama que inicia contando que, de pronto, una sombra va surgiendo frente a los libros, los cigarrillos y el rostro asombrado del guionista, que está trabajando. Cobra forma y voz. Y comienza a contar su historia tremenda, iniciada una noche en Vicente López. «Alguien me llamó El Eternauta», se presenta. «Soy un peregrino de Dios», afirma.
El Eternauta en GENTE, año 1969
El relato de El Eternauta aparecido empezó con cuatro amigos que mantenían un partido de Truco. Entre ellos está él, Juan Salvo, el dueño de casa, propietario de una fábrica de televisores, pero con ambición de escribir un libro (según la adaptación de Oesterheld para GENTE). De pronto, cuando a un «falta envido» le contestaba una «flor», se apagó la luz.
El Eternauta en GENTE, año 1969
Los cuatro amigos se asomaron a la ventana y descubrieron el horror detrás de los vidrios fríos: automóviles chocados contra árboles y postes telefónicos, la gente tirada en la calle, con apariencia de muerte,. Y una nieve extraña para esta ciudad. Lucas quiso abrir una ventana pero se lo impidieron: «No, no abras… Seguro son copos de nieve los que nos matan. No tiene que entrar ninguno».
El Eternauta en GENTE, año 1969
La invasión se ha concretado. En la casa de la reunión se han utilizado todos los métodos para lograr el aislamiento. Por lo menos saben que los copos no son radiactivos y sólo matan por contacto directo. La casa de Vicente Lopez tiene aire para varios días, al menos el suficiente como para esperar la ayuda internacional que parece comenzar concretarse. Las emisoras propalan constantes comunicados que hablan de una ataque extraterrestre. Hay vidas cobradas por los invasores de formas insólitas y métodos desconocidos.
El Eternauta en GENTE, año 1969
Polski se convirtio en un cuero más. consumido por los copos. Quiso llegar a su casa, a rescatar a su familia de la que no tenía más noticias. El teléfono no contestaba
La invasión seguía avanzando, las radios continuaban emitiendo comunicados alarmantes
al mundo.
El Eternauta en GENTE, año 1969
Los copos mortíferos siguen cayendo. Quien es tocado muere. En la casa de la reunión inicial se han realizado los preparativos necesarios como para vivir sin salir. Pero el terror comienza a hacer estragos y Lucas tiene un ataque de miedo histérico. Todos se enfrentan con su destino y con un futuro que se presenta incierto, temible.
El Eternauta en GENTE, año 1969
En la casa de enfrente ven encerderse una luz. Es la del ferroviario Ramírez. Imposible avisarte que no debe abandonar su vivienda porque los copos no perdonan. Elena se desespera, pero sabe que es imposible establecer comunicación: les teléfonos no funcionan. La tensión, la impotencia son insoportables. La luz permanece encendida y una sombra parece señalar que Ramírez está dispuesto a abrir lo ventana. Si lo hace, su vida, como la de Polski, quedará reducida a la nada por la mortífera caída de los copos de muerte que invaden la Tierra. El ferroviario se dispone a abrir.
El Eternauta en GENTE, año 1969
El ferroviario Ramirez abre por fin la ventana y cae fulminado por la nevada. Sus vecinos, impotentes, nada pueden hacer para alertar a él y a otros vecinos del peligro que corren
al entran en contacto con los copos mortales. Los teléfonos no funcionan. Las ventanas permanecen herméticamente cerradas. Los gritos jamás podrían oírse…
El Eternauta en GENTE, año 1969
Finalmente Juan resuelve salir de la casa para salvar a otras familias, pero Favalli lo hace desistir. La decisión final queda librada a un juego de dados. El que gana sale. Y gana Juan. El resto lo ayuda e ponerse el traje aislante y le entrega un rifle calibre 22. Favalli, que sospecha que entre los sobrevivientes de la nevada regirá la ley de la jungla, le recomienda que antes que comida o remedios traiga de vuelta armas. Armas para defenderlos. Juan llegará por fin al al garaje y abrirá la puerta que lo pondrá en contacto con los copos. Un extractor se encargará de expulsar a los que penetren en la casa cuando la puerta se abra. La delgada tabla esté por ser abierta. ¿Servirá el traje para soportar los mortales copos?
El Eternauta en GENTE, año 1969
Con un traje especial, Juan sale al exterior. Queda latente esa gran incógnita: si los copos podrán contra la vestimenta defensiva del hombre.
El Eternauta en GENTE, año 1969
Ya afuera, Juan Salvo rescata a una joven -Susana- que había sido encerrada en un sótano por su tío, que sin saberlo, de esa manera le había salvado la vida. Con ella regresa a la casa.
El Eternauta en GENTE, año 1969
En una expedición por las calles llenas de cadáveres, Favalli, por su parte, cumple con una singular proeza: vuelve con el furgón del almacén llevo de víveres, con los que podrán subsistir un mes en la casa. Posteriormente, deciden construir un segundo traje aislante, pensando que los viajes en pareja serán más provechosos. Después de hacerlo, Lucas y Juan salen. El primero siembra en Juan la semilla de la duda: «Favalli es superior a nosotros, cuando no nos necesite se desprenderá de cada uno. Él mismo dijo que muy pronto comenzara a imperar la ley de la jungla».
El Eternauta en GENTE, año 1969
Poco después asisten a un drama al que ya se están acostumbrando. Una pareja sale de una casa y muere al entrar en contacto con la nieve. Entonces ambos amigos siguen su recorrida hasta encontrar una farmacia. Ingresan. Aparecen dos nuevos personajes: un hombre y una mujer. Y la voz de Edmundo River cantando Sur.
El Eternauta en GENTE, año 1969
Mientras Juan e Lucas hacen el acopio de medicinas y todos los elementos necesarios para curas de primeros auxilios, el último desaparece. Juan lo busca y lo encuentra muerto, acuchillado por la espalda. Lo mataron para robarle el traje aislante.
El Eternauta en GENTE, año 1969
Juan vuelve a la casa llevando el cuerpo yacente del amigo, y se entera de las últimas novedades por la radio: América del Sur ha sido entregada a los invasores por el resto de los países para calmarlos.
El Eternauta en GENTE, año 1969
Un rato más tarde alguien llama pidiendo ayuda, abren la puerta y se produce un tiroteo. El desconocido cae muerto por las balas de Favalli. Llevaba puesto el traje de Lucas que había remendado en el lugar donde lo había apuñalado.
El Eternauta en GENTE, año 1969
Deciden partir hacia las montañas para evitar que estos ataques se repitan. Cuando terminan de prepararse, varios camiones se detienen frente a la casa. Dos personas uniformadas con trajes especiales los llaman a gritos: «Salgan los hombres, vamos a atacar al invasor. Si no salen rompemos las ventanas y morirán por la entrada de los copos de nieve».
El Eternauta en GENTE, año 1969
Son los milicianos que se disponen a atacar al invasor. Franco es uno de ellos. Cada hombre de los que integran el grupo de rechazo del invasor parece comenzar a vivir de nuevo. Algunos están simplemente arrasados por el espanto. Allí también se encuentra Susana, ojos húmedos, frágil, pero dispuesta a luchar hasta la muerte. Y Mosca, el historiador, escribiendo el horror sobre el terreno.
El Eternauta en GENTE, año 1969
Con el capitán Piedras ya está Favalli, flamante asesor científico del nuevo ejército. Se forma una vanguardia casi suicida. El teniente Alonso sugiere cambiar de planes, pero Piedras desenfunda y lo amenaza: «¡Ahora no se discute!».
El Eternauta en GENTE, año 1969
Juan Salvo es ascendido a teniente, y comienza el avance. En la Avenida General Paz y Maipú localizan al enemigo, que surge con un rayo.
El Eternauta en GENTE, año 1969
Favalli pide que los integrantes del grupo se parapeten en un terraplén. Salvo ubica a los enemigos y le avisa a Piedras: «Teniente, desde aquí se los domina». En ese momento el tanque un estalla, luego de ponerse incandescente por el rayo mortífero de los enemigos.
El Eternauta en GENTE, año 1969
Luego del estallido del tanque, Favalli, el cabo Amaya, Franco y el capitán Piedras deciden liquidar en primer lugar a los artilleros enemigos. La consigna es no permitir que el invasor siga lanzando rayos. Los monstruos -semejantes a cascarudos- no saben pelear y son fácilmente derrotados.
El Eternauta en GENTE, año 1969
Cuando los hombres del ejército están festejando este primer triunfo, alguien descubre la presencia de nuevos cascarudos. Otra vez la lucha. Otra vez se parapetan atrás del terraplén. El aparato lanzarrayos de los monstruos les sirve al mismo tiempo de coraza, Sin embargo, una sola descarga de los nuestros los achicharra. Los monstruos se retuercen.
El Eternauta en GENTE, año 1969
Acercándose a los que han conseguido derribar, hacen un descubrimiento que los paraliza: las púas de los cascarudos están en contacto con la masa encefálica y a través de ellas reciben órdenes de algún lado. Son robots vivientes. Los amos están en otro lado.
El Eternauta en GENTE, año 1969
Por otra parte, los hombres que se han organizado para luchar contra el invasor descubren que están aislados del resto de América, incomunicados. Intentan dirigirse al centro, cuando los edificios comienzan a derrumbarse como por acción de un terremoto, muy cercano a la cancha de River. Hacia allí avanzan. La mole será una trinchera.
El Juan Salvo de El Eternauta que publicara GENTE y el de Darin de la serie de Netflix que promete al menos una segunda temporada.

Restan las ediciones 214 (del 28 de agosto de 1969), 215 (4 de septiembre), 216 (11/9) y 217 (18), que culminarían la historia recreada por Héctor G. Oesterheld y el dibujante Alberto Breccia para GENTE y la actualidad. Pero optamos por llegar hasta aquí, más o menos donde termina la primera temporada de la serie que Netflix acaba de subir a su plataforma: es nuestra aporte para evitar spoilers y mantener el misterio.

Sí, nos atrevemos a añadir las tres palabras con que terminaba nuestra adaptación (y el tiempo explicará): «¿Será posible?» y el consabido «FIN».

Recopilación de material, escaneo y arte: Gustavo Ramírez (Archivo Grupo Atlántida)
Video: Gentileza Netflix
Edición de video: Miranda Lucena
Agradecemos a Agustina Benvenuto (Netflix) y a Camila López (Edelman)

 

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