Desde que comenzó su travesía a bordo del Buque Juan Sebastián Elcano, la heredera al trono español protagoniza diversas polémicas. Ahora, la princesa Leonor (19) se encuentra nuevamente en el foco de una nueva controversia, ésta vez en relación a sus hábitos poco saludables y su estilo de vida que desafía las estrictas normas de la Casa Real.

La hermana de la infanta Sofía viene preocupando cada vez más a los reyes de España, Letizia Ortiz y Felipe VI. El último episodio se debe a que la joven fue captada protagonizando excesos que alertan a la familia y escandaliza a la prensa de ese país.  

Lo cierto es que durante su formación militar en la Academia General Militar de Zaragoza y posteriormente en la Escuela Naval de Marín, la princesa viene aprovechando su libertad para disfrutar de la vida nocturna junto a sus compañeros. Testigos aseguran haberla visto bailando y consumiendo bebidas alcohólicas como vodka con limón, además de fumar vapeadores.

La preparación militar de Leonor es indispensable para que ejerza su rol como futura reina.

Ante esta situación, los reyes han intentado intervenir para corregir estos hábitos pero sin éxito aparente. A pesar de los esfuerzos de la Casa Real por mantener la discreción, los relatos y las imágenes de Leonor fumando y bebiendo en distintos puertos en los que se detiene el buque abrieron un nuevo capítulo sobre la imagen pública de la princesa y su preparación para asumir el rol de reina en el futuro.

Marzo pasado, capturada por un celular. Una de las imágenes de la princesa Leonor durante una parada del buque en un pub en Chile. Está embarcada en el Elcano desde mediados de mayo.

Otro mal hábito de la princesa Leonor que preocupa a Letizia

Además de sus problemas con el tabaco y el alcohol, Leonor viene desarrollado una fuerte inclinación por la comida rápida, especialmente hamburguesas y dulces, algo que comenzó desde su estancia en el internado de Gales. Este hábito ha continuado durante su formación militar, afectando su condición física y generando tensiones con la reina Letizia, conocida por promover una alimentación estrictamente saludable en la familia real. ​

Una princesa sin coronita. Leonor y los ejercicios y maniobras de gran demanda física a bordo del Elcano.

Claro que la presión mediática y las altas expectativas asociadas al rigor que exige su posición pueden haber contribuido al desbalance que presenta Leonor. Según los medios españoles, quienes citan fuentes cercanas a la familia real, la royal continúa recibiendo apoyo psicológico para que verse afectada por los rumores y para cuidar su salud mental ante tanta exposición.

Es sabido que tratar de encontrar libertad y autonomía en un entorno tan asfixiante como la monarquía, un universo lleno de reglas, no es nada fácil. Pero estos no son los únicos problemas que atraviesa, ya que la vida naval le impone una realidad con la que no estaría del todo cómoda.

Los tripulantes del buque reciben instrucción naval, marinera, militar y académica.

La princesa Leonor enfrenta tensiones a bordo del Elcano por restricciones de higiene

La princesa Leonor no solo ha llamado la atención por sus hábitos poco saludables y su comportamiento fuera del protocolo: también se ha convertido en foco de críticas dentro del buque donde cumple con su formación naval.

Uno de los problemas que más comentarios ha generado entre los oficiales del barco es su dificultad para adaptarse a las estrictas normas de higiene a bordo, que limitan el acceso a duchas a una vez cada tres días, debido a las regulaciones propias de la vida militar en alta mar.

La exigente rutina la obliga a la princesa a estar preparada físicamente para la vida de ultramar.

Acostumbrada a una rutina de aseo personal mucho más frecuente, Leonor habría manifestado su incomodidad ante estas limitaciones, generando cierto malestar entre sus superiores y compañeros. Según fuentes citadas por El Nacional, los oficiales ya estarían “hartos” de la actitud de la princesa respecto a este tema, y consideran que su resistencia a acatar la normativa refleja una desconexión con el espíritu de sacrificio que se espera de quienes integran la Armada española.

Algunos incluso se han mostrado preocupados por cómo esta experiencia podría estar afectando la moral general dentro del barco. Un nuevo foco de conflicto que suma más presión sobre la figura de la heredera.

Leonor, retratada con el buque Juan Sebastián Elcano de fondo. Su nuevo hogar nómade desde el 11 de enero pasado.

 

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